Deseo de todo corazón que nuestro Señor Jesús les bendiga con su paz, la paz que solo Él puede dar, especialmente en nuestros días, los que están llenos de tragedia y escándalos.

Les admito yo que tengo mucho miedo de los eventos que están sucediendo en nuestro país, en particular de los resultados posibles de la elección nacional y presidencial. Permítanme explicarme.

Si el Señor José Biden fuera declarado el próximo presidente, el 46 de los EEUU, entonces todos vamos a entrar en la era sin democracia. Es decir, opino que pronto después de su inauguración, el Señor Biden se va a empeorar su salud, porque sabemos ya que sufre la demencia; se olvida de nombres, de lugares, de personas, de su propia persona, y a veces no sabe dónde está. Las pruebas se notaban durante su pequeña campaña. Por eso, profetizo yo que dentro de 6 meses o menos, tendrá que renunciar la presidencia. Resultará que la Señora Kamala Harris va a sucederle, como la primera mujer presidente de los EEUU.

La Señora Kamala Harris se ha declarado una marxista y socialista. Como presidente, va a escoger a otra mujer como su vicepresidente, quien será una marxista y socialista. Las dos mujeres promueven el fin del uso de petróleo, gasolina, y otros combustibles fósiles. Ya el Señor Biden y la Señora Harris pertenecen a la organización VERDE. Esta organización, con miembros como el Señor Bernie Sanders, quiere que todos nosotros dejemos de usar de las cosas hechas de los productos de petróleo, tales como carros, llantas, autobuses, plásticos y más.

Esta organización de Verde va a reducir la cantidad de carne de res que comemos en este país. Como marxistas, serán como el Señor Hugo Chávez y el Señor Madura, los que destruyeron la nación de Venezuela de la más rica nación a la más pobre hoy en día. La gente en Venezuela está saliendo de su país y huyendo a España, Colombia, Costa Rica, y otros países de la América del Sur. Durante estos últimos años, los venezolanos estaban matando y comiendo los animales enjaulados en los zoólogos. Muchos ya no tienen trabajo, los impuestos federales les hacen muy pobres, hay mucha hambre y desesperación.

Además, el Señor Biden ha prometido que iba a asegurar que el aborto a solicitud sea una enmienda de la constitución de los EEUU, y que las fronteras de nuestro país estén siempre abiertas a todos los refugiados.

Quiere aumentar los impuestos tanto sobre los negociantes como sobre nosotros; lo mismo que hicieron los dictadores de la Cuba, Venezuela, Corea del Norte, de la China. Para que la población le obedezca al Señor Biden, va a considerar la encarcelación de personas no cooperativas. Un ejemplo obvio es que el Señor Biden había dicho que, para contener el coronavirus, va a cerrar todo el país, comenzando con los negocios, como restaurantes, iglesias, cantinas, gimnasios, estadios, deportes de toda clase, y las escuelas. El Señor Biden dijo durante su campaña presidencial que iba a mandar a toda la población de los EEUU que se vista con cubrebocas; tanto en público como adentro de nuestros hogares.

Opino que, si las fronteras de los EEUU fueran abiertas a todo el mundo, los musulmanes van a tomar la ventaja e invadir a nuestro país en gran número, porque no habrá ningún discernimiento de personas y de sus agendas. Sabemos por historia real que los musulmanes quieren conquistar a todo el mundo. A propósito, no comprendo yo por qué tantas mujeres americanas se conviertan de la cristiandad al islam. ¿No han leído el Corán? Yo sí, sí lo he leído. Las mujeres no cuentan para nada. Practican los hombres poligamia y la pedofilia, como fue notado en la noticias recientemente del caso de un hombre de 53 años de edad raptó a una chica cristiana de 14 años, forzándola a convertirse a islam y luego casarse con él. Los padres de la chica están ultrajados contra él y el islam. Parece que no puedan nada, porque un juez musulmán decidió que todos los actos del hombre musulmán fueron legales, según la ley sharía.

Hará menos de un año cuando ya no podamos reconocer a nuestra patria. Al menos que tengamos una intervención de parte de Dios, nuestra forma de gobierno y de democracia se va a desaparecer de la faz de la tierra, para siempre. El sueño americano ya no existirá. Los marxistas, comunistas, y socialistas van a traer una gran ruina sobre nosotros.

¿Es posible? ¿Es verdad? ¿Que todo esto sea la voluntad de Dios, su dedo de castigo, para humillarnos hasta que le reconozcamos a Él como el único Dios verdadero y hasta que obedezcamos su ley divina, la que se encuentra en la ley de la naturaleza y en el evangelio de Jesús, y hasta que renunciemos la homosexualidad y el aborto a solicitud?

Para los fieles y santos aquí en este país, aprendamos a sufrir toda clase de persecución, tortura, tormentos, rechazos, hasta la muerte. Que nos conformemos al Cristo crucificado por nuestra salvación y santidad.

Oremos a Jesús y a los mártires santos de la Iglesia católica que nos conceda Jesús la capacidad de sufrir por Él, a la gloria de su Padre celestial, y que acepte nuestras vidas sacrificadas en la Cruz, en propiciación por nuestros pecados y los del mundo entero. Amén.

El Espíritu Santo y la novia gritan: “¡Ven, Señor Jesús! ¡Ven!

Padre Mateo Krempel

16 noviembre de 2020